“El profesional de logística es una persona muy flexible, con la capacidad de resolver problemas complejos en poco tiempo”.
Facundo Casillas tiene 39 años de edad. Es contador público y magíster en Administración de Empresas del IAE, además de haber realizado estudios de posgrado sobre comercialización en Harvard Business School. Hace 19 años que se desempeña en TASA Logística: en sus inicios como administrativo en el área de finanzas y control de gestión, más tarde como jefe de Desarrollo de Negocios, gerente comercial, director comercial y de operaciones. En la actualidad, es el director ejecutivo de la compañía para la Argentina, Paraguay, Uruguay y Chile.
-Para usted, la logística es…
-Me gusta la definición que indica que es el modo de hacer llegar los productos y materias primas de un lugar a otro, en la forma más eficiente posible. Desde mi punto de vista, se trata de una actividad apasionante, para la cual es fundamental la disciplina, el orden y la flexibilidad, de modo tal de resolver todos los imponderables. Es un sector clave para que se puedan hacer negocios de muy variadas industrias.
-¿Cómo describiría la actualidad del sector logístico argentino?
-Creo que es un sector que, en los últimos veinte años, se ha profesionalizado muchísimo y ha ido adoptando cada vez mejores tecnologías. A su vez, luego de la pandemia y el crecimiento del eCommerce, se ha revalorizado mucho el rol de la logística, entendiendo la criticidad de este sector para el adecuado funcionamiento de toda la economía.
-¿Qué nivel poseen los operadores logísticos argentinos?
-Hay empresas muy serias, con trayectoria y que han crecido, teniendo hoy un buen tamaño, con estructuras profesionales y operaciones de primer nivel. Me ha tocado conocer operaciones en América latina, Europa y otras partes del mundo, y los operadores argentinos tenemos un muy buen nivel. En algunos casos, con relación a otros países, considero que podemos evolucionar mucho más mediante la incorporación de tecnologías.
-¿Cómo son los profesionales y recursos humanos del sector?
-El profesional de logística es una persona muy flexible, con la capacidad de resolver problemas complejos en poco tiempo. Debe ser analítico para manejar muchas variables y estar predispuesto a entornos muy dinámicos. Es una combinación que no siempre es fácil de conseguir en el mercado laboral.
-¿Cuál es su visión estratégica de la logística como negocio? ¿Por dónde pasa el negocio actual y cómo será en el futuro?
-Creo que la logística será cada vez más importante como negocio. En los distintos sectores, la evolución de la tecnología y la innovación han cambiado radicalmente algunos negocios. En el caso de la logística, el hecho de que las materias primas y los productos deban moverse físicamente de un lugar a otro hace que este sector sea crítico, lo mismo con los hábitos de consumo cada vez más personalizados, con demanda en tiempo real y con entregas cada vez más cerca de los consumidores. En este sentido, el negocio de la logística es cada vez más complejo. Posiblemente, vayan cambiando los medios a través de los cuales movemos materias primas y productos, pero esa necesidad sigue creciendo.
-¿La logística argentina es tan cara como sostienen desde ciertos sectores?
-Nuestro sector en particular no es formador de precios. Los márgenes de nuestra actividad son muy acotados, a diferencia de muchos otros sectores. Por otra parte, es una industria con mucha competencia, lo cual empuja a la eficiencia, dado que hay más de veinte operadores logísticos grandes y cientos de empresas de transporte. La mayoría de los costos proviene de otros sectores, por ejemplo, el combustible, los neumáticos y el parque automotor. Eso hace que la incidencia de los operadores en los precios sea baja y, en comparación con otros países de la región, los costos sean muy razonables. También es una actividad con una carga impositiva elevada en nuestro país, y eso impacta en sus precios.
-¿Qué reflexión hace cuando escucha que hablan de la logística como culpable de la suba de precios en productos?
-Creo que la suba de precios es un proceso mucho más complejo y que involucra al total de la economía. En línea con lo enunciado en el punto anterior y por esas razones, es claro que la logística no es el culpable de la suba de precios en los productos.
-¿Cuáles son los principales problemas que afronta la logística argentina?
-Hoy, el complejo contexto económico y social que tenemos creo que es un factor común a todos los sectores de la Argentina. Ojalá podamos rápidamente tener un escenario de mayor previsibilidad, con crecimiento e inversión para la industria. Si eso ocurre, será bueno para el país y lógicamente también para nuestra actividad.
–Si le tocara armar un Plan Logístico Nacional a 15 años, ¿cuáles serían los tres primeros puntos que definiría como esenciales?
-Infraestructura, con rutas, autopistas, caminos, puertos y ferrocarriles, incentivos para financiarlos, y un importante marco que apunte a la sustentabilidad en todos los sentidos, mediante la reducción en las emisiones de carbono, la seguridad vial y el cuidado del medio ambiente.
-Para 2050, la logística argentina…
-Será, sin dudas, una actividad crítica para el desarrollo del país, mucho más profesionalizada y más valorada por el resto de los sectores.
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