Desde su reciente nombramiento al frente de la Asociación Latinoamericana de Logística (Alalog), Jorge López no paró de generar reuniones, planes y proyectos para llevar adelante en los próximos dos años que dura su mandato. Consciente de la importancia de abordar la logística regionalmente y trabajar para acelerar los procesos, el directivo ya contempla los pasos para la incorporación de nuevos miembros, el fortalecimiento de las cámaras nacionales y la necesidad de crear consejos nacionales de logística en cada país miembro. En esta entrevista, el actual presidente de Cedol, adelantas los temas que abordará durante su gestión al frente de la entidad que reúne a los principales referentes de la logística regional.
¿Qué representa este nombramiento en Alalog desde lo personal y como titular de Cedol?
En primer lugar, es un reconocimiento a Cedol y a los operadores logísticos que integramos esta cámara y que nos posiciona de cierta forma hacia Latinoamérica. En el continente hay países con mucha necesidad de aprender, de incorporar mejores prácticas comerciales, operativas, institucionales o financieras. Tenemos problemas y desafíos comunes. Para Cedol es una satisfacción y orgullo poder encabezar este nuevo proyecto, pero a la vez una gran responsabilidad que incluye la oportunidad de compartir y promocionar las mejores prácticas. Lo importante de participar en estas organizaciones es que te permite pensar y proyectar regionalmente, es decir, participando amplias tu mirada y la manera de pensar las cosas. Por supuesto, esta mirada regional también ofrece la posibilidad de nuevos negocios.
Hay que sumar otros países para completar esa mirada regional…
Por supuesto y ya empezamos a trabajar en ese sentido para sumar, por ejemplo, a Panamá, un país estratégico como hub logístico. Pero también nos vamos a reunir con Colombia, Ecuador y Chile para lograr su incorporación a la Asociación. Queremos conformar una entidad absolutamente latinoamericana y buscaremos que todos los países participen. Tenemos pensado realizar la próxima Asamblea de Alalog en abril de 2018 en Argentina, coincidente con el encuentro de Cedol, y nuestro objetivo es que para ese momento podamos ya contar, además de Panamá, con Chile, Ecuador y ojalá también con Colombia. Para eso deberemos reunirnos, compartir nuestros proyectos para una organización regional seria y en constante progreso que se apoye en un nuevo plan estratégico de acción. Para eso, nuestro comité ejecutivo ya comenzó a trabajar en el marco de Aladi para delinear un plan a corto, mediano y largo plazo porque es mucho lo que tenemos por delante. Tareas, actividades, roles y funciones. Hay mucho camino por recorrer y un amplio campo de acción en el marco de Alalog.
¿Cuál es su concepción de una logística regional?
Tenemos que ir paso a paso, pero la visión apunta a lo que es Europa, por ejemplo, donde los camiones no se detienen en las fronteras. Lo que ocurre hoy en nuestros países en ese sentido, es una locura. Aceptamos con total normalidad que los vehículos demores dos días en cruzar de un país a otro en la región. Es un enfoque retrógrado. En las fronteras hay que pasar, no hay que parar, como ocurre entre España, Francia o Italia. En ese sentido, es clave tomar medidas en torno al uso de papeles. Eso no existe más, hoy todo es digital. Pero nosotros tenemos un problema serio en ese aspecto y hay que trabajarlo. Es una oportunidad para facilitar el comercio intrarregional.
Otro aspecto, quizás a largo plazo, será trabajar con las asimetrías que tenemos con Brasil o con México. En algún momento estábamos muy equilibrados, no había grandes diferencias en temas salariales o de combustibles, pero hoy los costos cambiaron enormemente y Argentina tiene un serio problema en ese sentido. Pero todo debería ser por etapas y, en la primera, tenemos que abocarnos a desburocratizar, eliminar trabas para facilitar el comercio.
Volviendo al plan estratégico que mencionó, ¿cuáles serían los puntos centrales en lo inmediato?
A corto plazo la idea es completar el cuadro de representantes y buscar la manera de contar con otro tipo de socios. Es decir, el operador logístico es un gestor de flujos y como tal está llamado a liderar todos los sectores, no sólo el transporte. Un operador logístico recibe importaciones, prepara exportaciones, etc. Hay muchas operaciones, como algunas vinculadas al comercio exterior, que también cuentan con cámaras y asociaciones que se pueden incorporar a la actividad de Alalog mediante alguna figura o categoría diferente de socios. Además, es clave empezar a interactuar intensamente con otros organismos regionales, como por ejemplo, el BID.
También queremos acompañar con mucho énfasis el trabajo local de cada cámara miembro para simplificar, agilizar las operaciones e incorporar tecnologías. Esto será una prioridad para Alalog. Como lo será participar en el desarrollo de proyectos de organismos internacionales para mejorar la infraestructura regional.
¿Y a largo plazo?
El objetivo será trabajar en una integración conjunta con todos los organismos. Debemos lograr que en cada país se constituyan los denominados consejos nacionales de logística, como ya existen en Uruguay o Colombia. Para eso, hay que fortalecer cada cámara y darle el know how para poder generar en su país un Consejo nacional de logística integrado por Cancillería, aduana, ministerios de Economía y Transporte. Es el paso previo para poder interactuar luego en la creación de políticas y acciones comunes a nivel regional.
De todos los proyectos que menciona, ¿cuáles considera clave para su mandato?
Primero, completar la integración de los países que faltan. Luego, fortalecer todas las cámaras para que participen en sus respectivos Consejos nacionales de logística. Nuestra intención es que en los años que estemos al frente de Alalog podamos colaborar con el desarrollo de cada cámara y avanzar en el liderazgo del operador logístico en la gestión de los flujos comerciales a nivel regional.
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